martes, 18 de marzo de 2014

Mariposa mensajera

El domingo estuve junto al mar. Para mí, las playas son lugares muy importantes, no necesariamente para tomar el sol o bañarse, sino como lugares oráculo. Allí, me siento completamente en armonía con mi entorno, conmigo misma y con mi fuego interior. El mar me conecta inmediatamente con mis terrenos internos, y suelo recibir muchos mensajes si permanezco atenta.

Viviendo en Madrid, las ocasiones de pasar tiempo junto al mar son escasas, y por lo tanto, preciosas. Así que aproveché el momento y pasé unas 3 horas empapándome de aquel lugar y abriendo muy bien todos mis sentidos y mi percepción. Y recibí varios mensajes. Entre ellos, el más importante es el que me entregó una sencilla mariposa.

Me encontraba sentada en la arena, contemplando el mar, cuando una mariposa pequeña, de color naranja, apareció de la nada y comenzó a revolotear a mi alrededor. Finalmente, se posó sobre la arena a mi lado, y allí estuvo un buen rato. Juraría que me habló, pero como aún no sé comprender el lenguaje de las mariposas, me limité a seguir contemplando el mar junto a ella. Sin embargo, entendí su mensaje sin necesidad de palabras.

Siempre permanezco muy atenta a los animales que aparecen en mi vida diaria, los que veo forma fugaz y los que se me acercan; y especialmente, presto atención a los animales que aparecen en mis sueños. A veces, recibo la misma información del mismo animal de diferentes maneras el mismo día o en un plazo de unas 48 horas. Cuando ocurre ésto, lo interpreto como que el animal se asegura de que he recibido el mensaje que ha venido a entregarme, apareciendo en mi vida de formas diferentes.

Por ejemplo, el sábado por la mañana, cuando estaba en la playa, vestía una camisa blanca con un estampado de mariposas de colores; al rato, apareció mi amiga la mariposa mensajera naranja y disfrutamos un rato precioso las dos juntas; al día siguiente, y sin saber nada sobre mi episodio con la mariposa mensajera, mi creativa amiga Rita Stone, me envió una foto de su reto creativo de 12 semanas correspondiente al día de ayer, donde había decorado un plato y una vela con mariposas azules; y además, ayer mismo por la noche, otra persona que participa también en el reto creativo, mostró una foto de una pequeña mariposa naranja con alambres. Querida mariposa mensajera, recibí tu mensaje, te lo aseguro.

La mariposa es el símbolo por excelencia de la transformación. Y recibiendo este mensaje, me he dado cuenta de que últimamente, los post que comparto con vosotros en el Oráculo del fuego interior, giran en torno a la transformación. Así que acabo de comprobar que mi propio blog del Oráculo se está convirtiendo en un oráculo de mi propio fuego interior para mi misma. Y esto, me deja sin palabras...

Volviendo a la mariposa, su presencia en tu vida te muestra que te encuentras en un profundo proceso de transformación personal, pero además, y lo más importante: te invita a mirar más allá de tu propio drama personal, a salir por un momento de tu amargura, tu tristeza, tu dolor y tu desánimo, y a darte cuenta de que al final de este proceso, si te permites vivirlo y dejas que te transforme de verdad, encontrarás una nueva versión de ti mismo, más libre, más hermosa, más ligera, y con la capacidad de elevarte por el aire hasta las alturas.

La agonía de la oruga que se ahoga y se destruye dentro de su crisálida, es terrible. De hecho, cuando la mariposa emerge, no queda nada, absolutamente nada de la oruga en ella, hasta su ADN ha cambiado completamente durante el proceso; la transmutación es total. Dentro de la crisálida de tu propia crisis personal, todo es pérdida y sufrimiento, el dolor te inunda y te ciega. A veces, simplemente, desearías morir. Y eso es precisamente lo que ocurre, mueres a ti mismo, pero la buena noticia es que al mismo tiempo, renaces.

Y ésta es la clave del mensaje de la mariposa:
"Tu transformación interior es radical, pero no permitas que el propio proceso te arrastre. Se paciente y mantente firme y fuerte, pero flexible, como un árbol en medio de la tormenta. No te resistas al cambio, acéptalo, abrázalo, y permite que se abra una nueva puerta en tu vida; y lo más importante, disfruta mientras tanto, sal, diviértete, cultiva la alegría y la belleza, rodeate de las personas que amas, vive el momento presente intensamente, pero mira más allá, mira la eterna maravilla que es la vida, y empápate de su magia. Así, poco a poco, comenzarás a vislumbrar la nueva criatura en que te estás convirtiendo, y la nueva existencia que te aguarda cuando emerjas de tu crisálida". - Victoria Vanadis©

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Me gusta saber tu opinión y conocerte un poco más. ¡Anímate a comentar!