¿Navegas por un mar de dudas y de infinitas posibilidades? ¿Te preguntas: será verdad que yo también tengo un oráculo interior?
No sigas dudando, respóndete ya mismo. Agarra un trozo de papel y un bolígrafo, o un lápiz, o pinturas, o tu libro favorito, o el suelo de tu casa, o tu almohada... Cualquier cosa que se te ocurra. Respira profundamente unas cuantas veces, relájate, y con la mente libre de pensamientos, pregunta: Oráculo de mi fuego interior, ¿Estás ahí? Si estás ahí, dame algún mensaje útil para mi vida, por favor...
Entonces, coge tu bolígrafo, o tu lápiz, o tus pinturas, o tu libro, o ve a dormir, y escribe, dibuja, pinta, o abre el libro por donde te plazca, o baila, o permítete soñar, todo esto sin juicios mentales y sin restricciones de ningún tipo a lo que brote de tu interior.
Permite que brote cualquier palabra, imagen o el recibir cualquier frase, o movimiento o sueño que llegue, acallando al mismo tiempo esa otra voz que ya conoces tan bien, que no te hace ningún favor, y que dice: ¡Vaya, qué tontería!
Permítete expresarte libremente, sin prisa, y tras un rato, revisa lo que has escrito, dibujado, leído, danzado o soñado. El mensaje que tu fuego interior tiene para ti, está ahí, en tu papel, o libro, o danza, o sueño... Sólo, permítete recibirlo con apertura total y sin juicios. Te sorprenderá el resultado. -Victoria Vanadis©
Imagen: imagen libre de derechos de autor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Me gusta saber tu opinión y conocerte un poco más. ¡Anímate a comentar!